Lo había visto otros otoños, con más o menos proporción de hojas en las ramas y en el suelo, pero nunca como este día; el suelo completamente cubierto de hojas y en el árbol aún las suficientes como para teñir de dorado la luz bajo él.
Por si esto fuera poco, una tenue neblina desdibujaba y daba cierta uniformidad a un fondo enmarañado. Así que no podía dejar escapar esta oportunidad única.
Pero que imagines la foto, no es lo mismo que luego puestos a ello, sea fácil meter en el encuadre de forma armónica todo aquello que estás viendo. Y este lugar, por sus carcterísticas y la disposición de los elementos, se resistía mucho a la simplificación que supone contener todo aquello en una sola imagen.
Después de un rato probando desde diferentes puntos, este fue el mejor resultado. (Clik en la imagen para verla más grande).
Haya , río y otoño (F:11,V:3,2,ISO:100) |
No hay comentarios:
Publicar un comentario