martes, 24 de junio de 2014

LA FLOR DE LOS CAMPOS DEL RAYO

                          La Asphodelus cerasiferus es una planta de la familia de las liliáceas asociada al clima mediterráneo. Prospera en claros del bosque y laderas de matorral.
          En la antigua Grecia era una planta utilizada en las ceremonias funerarias, por estar asociada a la muerte y al tránsito de los campos Elíseos ("lugar alcanzado por el rayo") que según la mitología, era una sección paradisíaca del inframundo, donde las almas nobles pasarían la eternidad.
           Se me ocurre, que  seguramente no es nada casual la mitología asociada a ella y que sea esta planta una de las que frecuentemente colonizan lugares que fueron devastados por un incendio.
          En los primeros días de la primavera, cuando todavía los árboles no han abierto sus hojas y la climatología tiene aún períodos casi invernales, las hojas de esta planta comienzan a abrirse paso hacia la luz desde el refugio de sus tubérculos subterráneos.
         Necesitará aún meses, para hacer crecer  su largo tallo hasta alcanzar los dos metros de altura en algunos ejemplares y cubrirlo de esas flores de color blanco puro. Ellas, constituyen un reclamo irresistible que llevará a infinidad de especies de insectos a lugares que fueron arrasados por el fuego.

Asphodelus cerasiferus.
Asphodelus cerasifeurs (F:13,V:1/80,ISO:100)

martes, 10 de junio de 2014

EXTREMADAMENTE MATERNAL

                        Existen ciertas pautas de comportamiento que por su nobleza o sofisticación, los humanos tendemos a atribuirnos en exclusiva sobre el resto de las demás especies animales. Y qué decir de los sentimientos, que supuestamente únicamente nosotros somos capaces de experimentar y que son algo así, como el atributo identificativo de nuestra pretendida "naturaleza superior".
         En una tarde de verano, bajo un calor agobiante esta "insignificante" araña permanecía cuidando de sus crías recién nacidas, aún casi translúcidas, teniendo como único refugio la ligera sombra de su nido de seda.
         Esta es una de esas especies, que inhiben el instinto de alimentarse cuando sus huevos eclosionan y permanecen así, protegiendo a sus pequeños hasta llegar a morir de inanición. Uno de los ejemplos  más extremos de sacrificio por la descendencia.
         A quienes argumenten que esto no es más que un mecanismo instintivo desprovisto de cualquier contenido intelectual o emocional, decirles, que las últimas investigaciones neurocientíficas, indican que la mayor parte de nuestro "sofisticado" comportamiento, obedece a pulsiones inconscientes. Y también  felicitarles por haber alcanzado un tan alto grado de sabiduría y evolución, tan próximo a la divinidad, que les permite saber que es lo que es capaz de pensar o sentir un ser de otra especie.

Araña y sus crías
Araña y sus crías (F:9,V:1/100,ISO:160)

jueves, 5 de junio de 2014

EL REGRESO DE LOS JACINTOS.

                      Aquella primavera que pareció no existir, los Jacintos estrellados (Scilla lilio-hyacinthus), como cada año  fueron fieles a su cita con el viejo haya.
          Las temperaturas anormalmente bajas para la época en el tiempo que duró su floración, hicieron que se conservaran algún día  más los colores de estas plantas tan delicadas como efímeras.

Jacintos estrellados
Hayedo y Jacintos estrellados (F:13,V: 2,5s,ISO:100)