jueves, 24 de enero de 2019

DESPROPÓSITO MUNICIPAL EN SALBURUA; VITORIA


                       Por favor lee la información de este enlace. Aunque pueda parecer una broma de mal gusto, no lo és: https://www.elmundo.es/pais-vasco/2019/01/21/5c4613e221efa0aa188b476a.html.

            Sí; por increíble que parezca, al ayuntamiento de Vitoria, no se le ha ocurrido una forma mejor de controlar la población de jabalíes en el parque de Salburúa, que mediante la caza con arco.
         
           Quiero pensar, que quien ha tomado la decisión de gestionar la fauna en Salburua con métodos medievales, en el siglo veintiuno. Lo haya hecho más que por absoluta incompetencia (que también pudiera ser), por ignorancia de las crueles consecuencias de esta modalidad de caza.
          Como quiera que sea, es inquietante comprobar que responsables de la gestión ambiental, sean capaces de llegar a conclusiones como esta, no sé si más propia de Maquiavelo; o de Homer Simpson.

            Para ilustrar lo que conlleva la caza con arco, te contaré una triste historia, cuya veracidad es fácil de comprobar preguntando a la cuadrilla de caza mayor de la localidad de Villanueva de Valdegovia (Álava).
            Allí,  hace unos años, en una batida típica al jabalí, con armas de fuego, en las proximidades de un coto exclusivo para caza con arco. Mataron un jabalí que tenía una extraña joroba en su lomo. Cuando lo despiezaron, vieron asombrados, que en el interior de aquel gran bulto de tejido conectivo que el cuerpo del animal había ido produciendo para encapsular un elemento extraño y lacerante, había clavada una flecha de caza, cuya punta de cuchillas estaba incrustada entre sus vértebras. Y unido a ella, un trozo de astil de aluminio de 30 centímetros.
            Imposible imaginar cuanto pudo sufrir ese animal con eso clavado durante años.

            Si cualquier tipo de caza por diversión es un acto gratuito de crueldad. Y si dentro de una actividad cruel de por sí, lo más cruel, es la cantidad de animales que no mueren instantaneamente y agonizan en el monte durante horas, días, o semanas antes de morir. La caza con arco puede considerarse la forma más cruel de caza legal, ya que el porcentaje de animales que deja heridos y nunca son encontrados, llega a cuadruplicar a los que quedan en esas lamentables condiciones por arma de fuego.
             En cualquier caso, incluso si la flecha hace un blanco certero, el animal morirá lenta y dolorosamente por hemorragias internas, minutos, horas o días después. Y durante todo ese tiempo, su cuerpo estará atravesado por una varilla metálica con dos cuchillas en un extremo, mientras el otro, fuera del cuerpo irá enganchándose en toda la vegetación junto a la que pase.
             Esto es, para lo que el ayuntamiento de vitoria a dado permiso que se haga de forma inminente en Salburúa:    https://animalrightscollective.wordpress.com/2009/12/17/fairfax-county-va-allows-deer-bow-hunting-as-management-technique/

https://revistajaraysedal.es/ciervo-con-una-flecha-clavada/

 https://exposingthebiggame.wordpress.com/2013/10/28/new-photo-of-deer-with-arrow-stuck-in-him/

https://www.dailymail.co.uk/news/article-2491107/Deer-impaled-arrow-shot-blundering-hunt-spotted-searching-food-wildlife-officials-fail-catch-injured-animal.html

            La pregunta es: ¿Es esto digno de lo que somos como sociedad y, de lo que Vitoria pretende ser como ciudad?.

            Si piensas que no; te animo a que ayudes a parar este despropósito haciéndoselo saber al ayuntamiento en sus departamentos correspondientes (Direcciones de correo y teléfonos abajo). Y haciendo que esto se conozca. Y de cualquier otra forma que consideres oportuna.

            Y si quieres saber más de la especie contra la que se va a perpetrar lo que acabo de contarte, te remito a esto: https://fermincastellano.blogspot.com/2018/03/jabali-perseguidos-cruel-injusto.html

                medioambiente@vitoria-gasteiz.org     telf: 945161616                                        
                 ceaadmin@vitoria-gasteiz.org        telf:  945161616

             fdejuana@vitoria-gasteiz.org                  telf: 945161926
  
                  
                   

lunes, 21 de enero de 2019

NOCTÁMBULOS

                           La implacable acción depredadora de nuestra especie sobre todas las demás desde "la noche de los tiempos" (nunca mejor dicho). Ha ido obligando a que las que podían hacerlo, fueran adquiriendo  hábitos cada vez más nocturnos.
             En esos lugares ya escasos, poco frecuentados por humanos, los zorros y otros animales considerados como nocturnos, llegan a ser animales diurnos.
            No han sido pocas las ocasiones en las que los he podido observar a cualquier hora del día, tumbados al sol, o intentando cazar ratones o topillos que son su principal fuente de alimento.
             Pero fuera de esos lugares en los que se sienten a salvo, para no coincidir con nosotros, pues les va la vida en ello, se condenan a sí mimos a vivir en la oscuridad.
             Esta vez, para conseguir la foto tuve que cambiar mi horario por el de los perseguidos. Hubiera quedado más favorecido con su espeso pelaje invernal, pero era final de primavera y ya  había iniciado su cambio de pelo preestival.(Clik en la imagen para verla más grande)

Zorro con pelaje estival (F:9,V:1/250, ISO:200)

sábado, 12 de enero de 2019

LA RANA ARBORÍCOLA

                           Quizá sean los anfibios, uno de los grupos de especies más directamente perjudicados por los cambios y la destrucción que nuestra especie está infligiendo al planeta.
            En vista de la alarmante disminución de sus poblaciones en las últimas dos décadas en todos los continentes, especialmente en los más industrializados, los científicos advierten ya de la posible extinción de muchas de estos seres.
         
            Cuando era pequeño, nos decían que aquel extraño sonido que procedía de entre las ramas de los arbustos, lo producía una especie de culebra.
            A pesar de que siempre intentaba encontrarla entre la maraña de hojas verdes, el sonido siempre acababa cesando antes de que descubriera a su emisor.
            Más tarde supe, que aquel potente croar, era en realidad el canto de la rana de San Antonio (Hyla arborea).

            Si cada vez es más raro escuchar ese sonido en las bochornosas tardes de verano, encontrar una de ellas entre la vegetación, de la que parecen formar parte; fué una enorme suerte. (Clk en la imagen para verla más grande).

Rana de San Antonio (Hyla arborea)
Rana de San Antonio (Hyla arborea) (F:10,V:1/100s,ISO:160)