sábado, 6 de abril de 2019

EL DESPEGUE DEL METEORO

                                  Todo lo que sucede en la naturaleza es de tal magnitud, que da igual los años que hayas pasado en ella y, las cosas que hayas visto;  sabes que siempre te queda por ver algo aún más asombroso.
                  Seguramente la naturaleza seguirá sorprendiéndome, pero en cuanto a lo que tiene que ver con la velocidad pura y el dominio del medio aéreo, va a tener difícil superarse después de aquellos días en que tuve el extraño privilegio, de poder observar y fotografiar de cerca a una pareja de alcotanes, en la despedida de su territorio de reproducción, poco antes de su partida hacia África.
                  Porque sé que no conseguiría intentando describirlas, aproximarme ni siquiera un poco a las proezas que pude ver; no lo haré. Pero baste con decir que incluso para alguien acostumbrado a observar aves, especialmente a las más veloces, poderosas y virtuosas en el dominio del aire, aquello que vi, por momentos llegaba a resultarme increíble.

                  Con el sol ya a punto de ocultarse tras el horizonte, esta hembra de alcotán, por fín se había posado en el sitio previsto, después de haber estado sobrevolando durante horas junto al macho un punto muy concreto de su territorio, mientras cazaban grandes insectos voladores, pequeñas aves insectívoras ya en migración y, realizaban increíbles vuelos de exhibición para reafirmar su vínculo. Que estaba a punto de quedar interrumpido por su migración, pero que retomarían en la primavera siguiente.
                 Indescriptible también, la sensación, al tener un ser tan veloz, aéreo y escaso como este, por fin allí delante de ti, a unos pocos metros.

                 El macho, con sus continuos gritos y veloces pasadas sobre el árbol, reclamaba la compañía de la hembra en el aire.
                 Tres segundos después, como un torbellino ella despegó gritando en persecución del macho, sin casi haberme dado tiempo a modificar la configuración de la cámara para una acción tan rapidísima.
                 Y este fue el resultado. Un aimagen que estuve a punto de borrar por lo incorrecta. Porque sabía  que de no hacerlo, siempre me recordaría lo que pudo haber sido y no fué. Hoy me lo sigue recordando, pero me alegro de no haberla borrado, por lo que tiene de recuerdo de aquellos días inolvidables. (Clik en la imagen para verla más grande).

Hembra de alcotán despegando (Falco subbuteo)
Hembra de alcotan despegando (F:7.1,V:1/160s,ISO:200)

No hay comentarios:

Publicar un comentario